SUBMUNDOAVILA.




" NO TENGO NI LA MITAD DE MIEDO A SATAN COMO EL QUE TENGO A LOS QUE LE TEMEN. "


Santa Teresa de Ávila 1515 - 1582



lunes, 16 de mayo de 2011

PSICOSIS PARANOIDE.



Aquel día el señor marrón le presentó al señor negro en casa de este. Por lo visto el señor marrón decidió que así el señor blanco no tendría que acudir a él para aquellos turbios negocios.

El señor negro vivía con su familia en aquella casa familiar. Trabajaba como reparador de maquinas en una fabrica, además de trabajar con cierta cantidad de sustancias para luego venderlas en su tiempo libre y así sacar dinero para poder llevar aquel nivel de vida, además de a su familia que se encontraba en aquel lejano país donde la pobreza esta en la calle.

El señor blanco acudía a casa del señor negro casi todos los fines de semana. Al principio el respeto era un grado en la casa pero al final, el señor blanco se relajo y el señor negro se lo agradeció.
Ya no había llamadas de teléfono simplemente el acudía a tomar un café y charlar con el señor negro y su familia de las cosas cotidianas de la vida.

El señor marrón también manejaba las mismas sustancias que el señor negro, claro que las sustancias se las conseguía al señor negro aun precio mas barato, además del regalo que le ofrecía por cierta cantidad de producto.
Era un tipo desconfiado, siempre pendiente de llevar sus historias de una manera peculiar. Ponía el precio y calidad a los que en el confiaban, como eran sus amigos del barrio y compañeros de piso.

El señor azul, era amigo del señor blanco desde hacia mas de 20 años. Ya tenían muchas cosas en común, fiestas e historias de altas horas, de lo que la noche no esconde. También en su tiempo libre manejaba ciertas sustancia nocivas.

Aquel sábado el señor blanco acudió a casa del señor negro. Había veces que en casa del señor negro coincidían algunos de los que allí acudían por lo mismo o por amistad.
Esa tarde le presentaron al señor verde y su esposa. Ella extranjera y el español. Andaban de tratos con el señor negro de cierta cantidad de su producto.
Todo queda aquí, por ahora...

Aquel domingo el señor blanco salio de su casa por la mañana destino a casa del señor negro, cuando se percato que un coche matricula BBB-**** le siguió durante un largo trayecto en su recorrido hasta llegar a casa del señor negro. Así que antes de llegar se puso a callejear para ver si el coche dejaba de seguirlo.
En una de estas calles apareció un semáforo que se iluminó de rojo y del coche que seguía al señor blanco salio un hombre con un maletín y se marcho.
El coche desapareció pero a menos de unos 100 metros de callejear por la ciudad , volvió a aparecer otro coche matricula BBC-**** que le volvió a parecer sospechoso.
El señor blanco hizo la trece catorce al vehículo que le seguía y después de despistarlo marcho a casa del señor negro.
Apunto de aparcar en la casa del señor negro, apareció aquel coche BBC-**** de frente, así que el señor blanco desistió y marcho de nuevo a casa para evitar líos sobre lo que ya sospechaba.
Al señor negro le tenían en el punto de mira.

Aquella misma tarde el señor marrón llamo al señor blanco. Hacia mucho tiempo que no se veían y el señor marrón pretendía que el señor blanco fuera esa tarde a casa del señor negro para conseguir cierta cantidad de material.
El señor blanco después de aquella mañana de movimientos decidió no ir, por lo que el señor marrón le comento de ir a tomar aun que sea unas cervezas y así verse.
Aquel lugar estaba vacío. El bar se encontraba en un barrio nuevo en el que apenas aun vivía gente debido a la crisis en la que se encontraba el sector.
Allí acudió el señor blanco y se encontró al señor marrón.
El señor blanco decidió comentarle por que no había acudido al señor negro para conseguirle su material y entonces el señor marrón le comunico al señor blanco que el ya lo había conseguido por otro lado.
El señor blanco se extraño de lo que pasaba y de pronto en el bar de aquel barrio vació apareció una pareja, ella mayor que el y el pinta de no ser su pareja , ni su amigo, mas bien compañeros de trabajo. La señora rosa y el señor gris no encajaban en ese lugar a esas horas.
Después de observar durante un pequeño tiempo la situación en aquel lugar, el señor blanco decidió irse a casa.

Llego el lunes y el señor blanco fue a trabajar y allí apareció un nuevo compañero, el señor verde había fichado por la misma empresa que el señor blanco.
El señor blanco decidió no fiarse de aquel hombre. Resultaba que su mujer, aquella que presento al señor negro y al señor blanco no era la joven extranjera. Además de tener un crío y una hipoteca, su mujer, la del señor verde, era española.

El señor azul, comento al señor blanco que el señor marrón y el señor verde trabajaban para aquella extraña pareja del bar, la señora rosa y el señor gris que la acompañaba. Que la no mujer del señor verde trabajaba también para la señora rosa y el señor gris que andaban detrás del señor negro.

Llegando el viernes el señor blanco estaba confuso ante tantas coincidencias y extraños sucesos que pasaban a su alrededor.
Decidió acudir a su psiquiatra y explicarle la situación.
Deduciendo que el señor blanco en el momento actual tenia un parte de PSICOSIS PARANOIDE.


...El señor negro fue detenido una semana después.

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